
Joyas Feng Shui chinas: el arte de llevar joyas que prometen auspicios milenarios
Cuando la luz de la luna oriental se desliza sobre las escamas de Pixiu y las alas de Qilin rozan el jade en la muñeca, un pequeño adorno se convierte en un portador de energía milenaria. La joyería fengshui china nunca ha sido una simple decoración; es la materialización de la sabiduría del I Ching , la continuación material de antiguas leyendas y la conexión armoniosa entre los seres humanos y el campo energético natural.
Pixiu : El Código de la Riqueza del Noveno Hijo del Rey Dragón
En la leyenda del Palacio del Dragón del Mar de China Oriental, Pixiu es el hijo más especial del Rey Dragón. Tiene cabeza de dragón, cuerpo de caballo y pies de unicornio, pero su boca carece de ano; esto no es un defecto, sino una bendición del Emperador de Jade. Se dice que Pixiu comía hierba mágica en la corte celestial y fue sellado por el Emperador de Jade para que solo pudiera ingerir, pero no excretar, convirtiéndose así en la bestia divina a cargo de la riqueza.
Wang Chong, de la dinastía Han, registró en Lunheng que el emperador Wu de la dinastía Han cazó una extraña bestia con forma de Pixiu y convirtió su pelaje en un estandarte, tras lo cual el tesoro nacional se volvió cada vez más abundante. Hoy en día, los colgantes de Pixiu tallados en jade aún perpetúan esta leyenda: la cabeza mira hacia afuera, lo que implica absorber la riqueza del mundo exterior; al llevarlos cerca del cuerpo, la textura 温润 del jade puede fundirse con el aura humana, creando un ciclo energético que atrae y conserva la riqueza. Los coleccionistas europeos y estadounidenses prefieren especialmente los brazaletes de Pixiu con incrustaciones de oro puro, creyendo que esta bestia divina de Oriente puede brindar una misteriosa ayuda a las inversiones en Wall Street.
Qilin: El tótem de la buena suerte de las antiguas bestias auspiciosas
El Libro de los Ritos registra que la noche anterior al nacimiento de Confucio, un Qilin llegó con un libro de jade en la boca, lo que alude al "Qilin Escupiendo el Libro de Jade". Como uno de los "Cuatro Espíritus", Qilin tiene cabeza de león, astas de ciervo, ojos de tigre, cuerpo de alce, escamas de dragón y cola de buey. Cada detalle esconde un código auspicioso: las astas de ciervo simbolizan la longevidad, las escamas de dragón representan la dignidad y la cola de buey implica diligencia.
En la dinastía Ming, los nobles reales disfrutaban de llevar colgantes de jade Qilin, creyendo que podían "alejar los malos espíritus y atraer la buena fortuna". Los diseñadores modernos han combinado patrones tradicionales con la estética geométrica, y las pulseras de plata Qilin se han convertido en un nuevo favorito de la moda. Un diseñador londinense dijo una vez: "La forma de Qilin está llena de armonía contradictoria; hay dulces bendiciones ocultas en sus líneas aguerridas, lo cual constituye el aspecto más encantador de la filosofía oriental". Se dice que quienes llevan joyas Qilin adquieren la sabiduría para distinguir el bien del mal y tomar las decisiones correctas en las encrucijadas de la vida.
Calabaza: El contenedor de energía de las herramientas mágicas de los ocho inmortales
La calabaza del tesoro de Tieguai Li puede contener todo lo del mundo, y esta leyenda ha evolucionado hasta convertirse en la creencia popular de que "la calabaza trae buena fortuna". Los taoístas creen que la forma redonda de la calabaza representa el cielo, la línea recta del pedículo representa la tierra y la cintura y el abdomen representan el ser humano, representando a la perfección la visión cósmica de la unidad del cielo, la tierra y el ser humano.
El Fengshui Guangyi de la dinastía Qing registra que colgar una calabaza en el dintel puede ahuyentar a los malos espíritus. Hoy en día, los colgantes de calabaza de cristal se han convertido en amuletos energéticos para la gente de ciudad: las calabazas de cristal púrpura ayudan con los estudios, las calabazas de cristal amarillas impulsan las carreras profesionales y las calabazas de obsidiana alejan a los villanos. En los looks de las estrellas de Hollywood en la alfombra roja, es frecuente ver broches con forma de calabaza; quizá no entiendan el "aura", pero pueden percibir la misteriosa sensación de estabilidad de Oriente.
Bagua: La fórmula cósmica deducida por el rey Wen de Zhou
Cuando el rey Wen de Zhou estuvo preso en Youli, dedujo el Bagua para comprender el gran Dao. Estos ocho símbolos, compuestos por líneas Yin y Yang, contienen las leyes del funcionamiento del cielo y la tierra: Qian representa el cielo, Kun representa la tierra, Kan representa el agua, Li representa el fuego, Zhen representa el trueno, Xun representa el viento, Gen representa la montaña y Dui representa el pantano.
La artesanía moderna ha miniaturizado el diagrama Bagua en adornos de plata para crear anillos giratorios. Los maestros del Feng Shui afirman que rotar el Bagua equivale a ajustar la frecuencia de resonancia entre el cuerpo humano y el universo. Un arquitecto neoyorquino lleva muchos años luciendo un collar Bagua, afirmando: «Es más preciso que las constelaciones. No predice el futuro, pero te enseña a vivir en armonía con el mundo».
La sabiduría de vestir: dejar fluir la energía
La joyería fengshui genuina es un medio para el diálogo entre los seres humanos y la naturaleza. Así como la ubicación del Salón de la Armonía Suprema en la Ciudad Prohibida enfatiza "mirar al sur con el norte al fondo", usar joyería fengshui también debe seguir la lógica energética: las de metal deben llevarse en la mano izquierda para absorber la energía del cielo y la tierra; las de jade, en la mano derecha para expulsar la energía turbia del cuerpo.
Estos adornos, portadores de miles de años de leyendas, se están convirtiendo en mensajeros del diálogo cultural entre Oriente y Occidente. Cuando las modelos de la Semana de la Moda de París desfilan con collares Pixiu, y cuando las élites de Wall Street acarician los brazaletes Qilin para pensar en inversiones, la antigua sabiduría oriental trae nueva energía e iluminación al mundo de la manera más moderna; después de todo, el anhelo de una vida mejor siempre ha sido un lenguaje común para toda la humanidad.
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